Sinonimia / Otros nombres científicos / Acrónimos
Anychus orientalis
Anychus ricini
Eutetranychus anneckei
Eutetranychus monodi
Eutetranychus sudanicus
Tipo de plaga
Ácaros
Taxonomía: Ácaros
  • Tetranychidae
Condición:
  • Plaga Cuarentenaria Ausente
Cultivos / Órgano afectado:
Descripción biológica

Huevos: Son ovalados o circulares, achatados. Recién colocados, son brillantes e hialinos, pero luego adquieren un color amarillento. Están fijados al sustrato mediante una película de seda.
Larva: Su tamaño medio 190 x 120 µm. La protoninfa es de color marrón pálido a verde claro, patas más cortas que el cuerpo, tamaño promedio de 240 x 140 µm. La deutoninfa es de color marrón pálido a verde claro, tamaño medio 300 x 220 µm.
Adultos: Existe un marcado dimorfismo sexual.
La hembra tiene forma ovalada, aplanada, y su color varía de marrón pálido a verde oscuro con manchas más oscuras dentro del cuerpo; las patas son tan largas como el cuerpo y de color marrón amarillento. El tamaño medio es de 410 x 280 µm.
El macho es mucho más pequeño que la hembra, de color anaranjado y tiene forma triangular alargada con patas más largas que el cuerpo. Las setas corporales son cortas y no se pueden ver con una lente.
Su ciclo biológico consta de varios estadíos inmaduros móviles antes de llegar al estado adulto. Del huevo eclosiona una larva con tres pares de patas, que pasa por tres estadíos ninfales, protoninfa, deutoninfa y tritoninfa. Estos, al igual que el adulto, ya cuentan con cuatro pares de patas. En las zonas afectadas es común observar los restos de las mudas que dejan al pasar de un estadio a otro.
Cada hembra puede producir una media de 8 huevos al día. El 80% de la población son hembras a temperaturas comprendidas entre 20 y 30ºC, situándose la temperatura óptima de desarrollo entre 21 y 27ºC. La longevidad del adulto oscila entre 12 y 21 días.

Signos y síntomas / Daños

Los daños causados son similares a los producidos por el ácaro rojo.
El ácaro se alimenta de la clorofila que contiene la capa de células que hay justo por debajo de la epidermis, produciendo un plateado y punteaduras cloróticas en la hoja y frutos.
Las decoloraciones en fruto desaparecen cuando se completa el proceso de maduración, ya sea este natural o artificial (desverdizado), aunque se observa un retraso de la maduración en la zona afectada.
Eutetranychus orientalis coloniza principalmente el haz de las hojas, se sitúa alrededor del nervio central, donde se pueden observar los restos de coriones y mudas de color blanquecino. Muestra una clara preferencia por las superficies expuestas al sol, por lo que estas zonas del árbol son las más afectadas.
Los ácaros comienzan a alimentarse en la parte superior de la hoja a lo largo de la nervadura central y luego se extienden a las nervaduras laterales, lo que hace que las hojas se vuelvan cloróticas. Se desarrollan vetas de color amarillo pálido a lo largo de la nervadura central y las venas.
En infestaciones más severas, los ácaros se alimentan y ovipositan en toda la superficie superior de la hoja. Las infestaciones muy fuertes de los cítricos provocan la caída de las hojas y la muerte de las ramas, lo que puede provocar la defoliación de los árboles. Poblaciones más bajas en áreas secas pueden producir el mismo efecto.
Los primeros ataques del ácaro rojo oriental tienen lugar a principio de verano y se extienden hasta finales de otoño.