Rhizobium radiobacter

R. radiobacter es una bacteria necrotrófica, en forma de bacilo, flagelada, que penetra en plantas hospederas a través de heridas recientes en las raíces o base del tallo, provocadas por herramientas de cultivo, injertos, insectos, nematodos, heladas o por grietas generadas durante la emergencia de nuevas raíces. Una vez en el interior del hospedero la bacteria coloniza la herida, multiplicándose y diseminándose intercelularmente y adosándose firmemente a la célula vegetal dañada, transmitiendo su plásmido (DNA condensado), el cual se integra al genoma de la célula vegetal modificando así su material genético. De esta manera, las células del córtex radicular, son inducidas a producir hormonas en gran cantidad, las que estimulan el crecimiento (hipertrofia) y división celular (hiperplasia), produciendo agallas. La transformación de la célula huésped es irreversible y el desarrollo del tumor continúa de forma automática, sin que sea necesaria la presencia de la bacteria. A medida que la agalla se desarrolla, provee un ambiente rico en nutrientes (opinas) que favorece el crecimiento bacteriano. Posteriormente las bacterias ubicadas en la superficie de las agallas se mueven hacia el suelo reiniciando el ciclo. Puede sobrevivir en el suelo durante varios años como organismo saprófito, es decir, alimentándose de materiales en descomposición, o en la superficie de plantas huéspedes o no huéspedes, especialmente en raíces.

Diseminación:
La enfermedad puede diseminarse fácil y rápidamente a través de la lluvia (por salpicadura), el agua de riego, herramientas, viento, insectos, nematodos, tierra transportada por el hombre o llevado por el viento, suelo, material de propagación (raíces y tallos) e infectar a toda la plantación o el vivero. No se conoce que pueda transportarse con flores, frutos, semillas, hojas o madera.